Cuando se trata de la salud de los hijos todo parece una emergencia médica, especialmente si eres un padre primerizo y te inquieta que ¡se rehúse a comer! o que ¡no ha hecho sus necesidades fisiológicas!, incluso parece que hoy ¡tiene llanto fácil! o ¡está muy inquieto! Si bien todo eso es preocupante, no significa que sea una emergencia de salud.